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<p><span>A través de </span><span>representaciones </span><span>en 3D, Charlotte Taylor imagina interiores y edificios que evocan la curiosidad de la infancia y un esp&iacute;ritu l&uacute;dico. Lo que comenz&oacute; como ejercicios digitales hoy empieza a tomar forma en proyectos que trascienden la pantalla y se materializan en espacios reales.<br /></span></p>
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<p style="text-align: justify;"><span>La diseñadora londinense es cofundadora del estudio de diseño digital <strong><a href="https://www.instagram.com/maison_de_sable/"><em>Maison de Sable</em></a></strong>, donde desarrolla mundos arquitectónicos junto a otros creativos. Entre </span><span>sus trabajos destaca </span><em>Futurismo del pasado</em><span><em>,</em> una serie de villas inspiradas en la visión futurista de los años sesenta y setenta, con ecos de la ciencia ficción y paisajes irreales.</span></p>
<p style="text-align: justify;"><span><br />Más recientemente, <a href="https://www.instagram.com/charlottetaylr/">Taylor</a> ha explorado colaboraciones que se acercan a lo tangible. Con el diseñador <strong>Nicholas Préaud</strong> concibió </span><strong><em>Casa Atibaia</em></strong><span>, un proyecto inspirado en el modernismo brasileño que reimagina una vivienda en São Paulo, elevada sobre enormes rocas y rodeada de naturaleza. También junto al arquitecto <strong>Andrew Trotter</strong> ha diseñado una vivienda en Utah, integrada al paisaje desértico, que forma parte del proyecto de retiro y hotel </span><span>Paréa</span><span>, actualmente en construcción. </span></p>
<p style="text-align: justify;"><span>Con esta mezcla de intuición, juego e imaginación arquitectónica, Taylor reflexiona sobre cómo lo digital, lo físico y lo poético se entrelazan en su práctica creativa. </span></p>
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<h4 style="text-align: justify;"><span>L&rsquo;OFFICIEL: </span><span>Durante tu tiempo en 3 Days of Design en Copenhague, varios de tus espacios evocaron una sensibilidad lúdica, casi nostálgica. &iquest;Cuánto de tu infancia o juventud se refleja &ndash;consciente o inconscientemente&ndash; en tus proyectos? </span></h4>
<p style="text-align: justify;"><em>CHARLOTTE TAYLOR: </em><span>Creo que bastante, aunque no siempre de manera intencionada. Siempre estaba reorganizando mi habitación, los muebles e incluso la ubicación de mi cuarto cuando era niña. Me instalaba bajo un escritorio, en una tienda de campaña o en la chimenea fuera de uso, y los amoblaba como mi habitación improvisada por una semana más o menos. Crear una sensación de hogar y familiaridad en espacios ajenos siempre me ha atraído; los bloques de lego y los peluches simplemente han sido reemplazados por sudoku y camisetas a rayas. Hay una cierta ingenuidad infantil en mi proceso de diseño, mucho se guía por la intuición, el movimiento y un puro sentido de juego y exploración más que por un diseño metódico o sobreingenierizado. Me interesan los espacios que invitan a quedarse o imaginar, más que solo pasar por ellos. </span></p>
<h4 style="text-align: justify;"><span>L&rsquo;O: </span><span>Algunos describen tu trabajo como utópico, pero para mí se siente como la visión de un niño sobre cómo podría ser la adultez: espacios hermosos, suaves y funcionales llenos de calma. &iquest;Diseñas pensando en tus sueños infantiles sobre los espacios para vivir? </span></h4>
<p style="text-align: justify;"><span><em>CT</em>: </span><span>No diría que estoy intentando conscientemente recrear sueños infantiles, pero sí creo que intento ir en contra de los bordes más duros y rígidos de la adultez. Me interesan los espacios que permiten una amplia gama de emociones, </span><span style="background-color: transparent; font-family: inherit; font-size: inherit; font-style: inherit; font-variant-ligatures: inherit; font-variant-caps: inherit; font-weight: inherit; letter-spacing: 0px;">actividades y actos de la vida, incluso dentro de las rutinas diarias. Quizás menos por nostalgia y más para ofrecer un ritmo o lógica alternativa a cómo vivimos. En la infancia, nuestro concepto de tiempo es muy diferente al que experimentamos en la adultez; poder desacelerar, pasar tiempo sin ser productivo, y reintroducir la sensación de que las habitaciones pueden sentirse sobredimensionadas o surrealistas, y cómo los objetos superan su función para convertirse en personajes en nuestras vidas.</span></p>
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<h4 style="text-align: justify;"><span>L&rsquo;O: </span><span>Tus proyectos se mueven fluidamente entre lo digital y lo físico. &iquest;Cómo decides qué ideas permanecen en forma de render y cuáles merecen volverse tangibles?</span></h4>
<p style="text-align: justify;"><span><br /></span><span><em>CT:</em> </span><span>A veces es instintivo, otras veces forzado. Algunas ideas parecen pertenecer al mundo imaginado, son más sobre el estado de ánimo o el gesto, y ocasionalmente las restricciones muy reales de la física y el presupuesto las mantienen suspendidas en el ámbito digital. Algunos conceptos comienzan a exigir su propia materialidad, cuando el concepto trasciende lo visual y el proceso evoluciona hacia cómo sonaría, cómo se desgastaría con el tiempo, o qué se sentiría al tomar presencia en una habitación. </span></p>
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<h4 style="text-align: justify;"><span>L&rsquo;O: </span><span>&iquest;Hay algún objeto, espacio o rincón de tu infancia que aún sirva como punto de partida para tu imaginación hoy?</span></h4>
<p style="text-align: justify;"><span><br /></span><span><em>CT:</em> </span><span>Pasaba mucho tiempo en el suelo cuando era niña, dibujando, construyendo cosas, haciendo un desorden. Me gustaba estar cerca de las cosas y tener todo extendido a mi alrededor. Esa forma de trabajar definitivamente se ha quedado conmigo. Todavía me atraen los espacios que se sienten abiertos y adaptables, donde puedes sentarte como quieras, mover las cosas y no sentirte restringido. Probablemente hago más trabajo de diseño en mi mesa de café que en el escritorio de mi oficina. </span></p>
<h4 style="text-align: justify;"><span>L&rsquo;O: </span><span>A diferencia de muchas propuestas contemporáneas, tus espacios no solo se ven bien, sino que se sienten habitables y amables. &iquest;Dirías que el confort emocional es parte de tu proceso creativo desde el principio?</span></h4>
<p style="text-align: justify;"><span> </span><span><em>CT:</em> </span><span>Sí, definitivamente. No me interesan los espacios que solo funcionan visualmente; quiero involucrar todos los sentidos y crear una sensación de armonía y confort más allá de lo pictórico. También tiene mucho que ver con el ritmo, cómo un espacio te hace desacelerar o te invita a notar un detalle y detenerte en una puerta. Hay cierta generosidad en eso, especialmente en nuestro entorno cada vez más acelerado y saturado. El confort emocional no es algo que añado al final, a menudo es donde comienza el proyecto. </span></p>
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Charlotte Taylor, mundos posibles

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